Ginebra, Suiza

¡Hola gente! La semana pasada no tuve mucho tiempo para dedicarle al blog y eso va a ser así a partir de ahora porque he empezado la reforma de toda mi casa, algo que llevo esperando meses aunque sé que me voy a agobiar bastante... Pero estoy muy ilusionada así que me paso el día en tiendas de bricolaje y materiales ojeando y comprando. ¿Algún consejo para sobrevivir a una reforma? 😝

Ginebra es la capital del Cantón de Ginebra, en Suiza, y hace frontera con Francia, por eso su idioma es el francés. Como sabéis yo estuve viviendo allí desde el 2011 hasta el 2012 y posteriormente visité la ciudad en 2015 y 2017. Iba a volver este año en Semana Santa pero el vuelo se canceló... Es la ciudad más bonita que conozco, y le tengo mucho cariño por eso no me importa volver de vez en cuando (aún estoy asimilando lo del vuelo cancelado, ¿a vosotrxs también os han cancelado vuelos?).

El famoso reloj del Jardin Anglais, siempre con flores típicas de la estación

Para mí lo mejor de Ginebra es lo increíblemente limpia y verde que es, y estoy totalmente enamorada de sus parques donde se ve reflejada toda esa naturaleza que a mi me chifla 💚 Tengo tantísimas fotos de éstos parques que hoy me limito a compartir unas pocas porque me estaba volviendo loca seleccionándolas, así que más adelante haré un post especial dedicado solo a sus parques. Los que os enseño en las fotos de abajo son el Parc La Grange (mi favorito) y el Parc Des Bastions. Ya visteis fotos del bonito Jardín Botánico de Ginebra hace unas semanas.

Parc La Grange

El Muro de la Reforma en el Parc des Bastions

Como siempre yo recomiendo que te pierdas por sus calles y callejones. El casco antiguo de Ginebra tiene bastantes cuestas así que harás ejercicio subiendo y bajando, pero vale la pena además es una ciudad pequeña así que en 1 o 2 horas como mucho ya tienes vista la parte vieja de la ciudad, a menos que te pares a ojear tiendas o a tomar algo rico (y caro, porque es una de las ciudades más caras de Europa y doy fe) en alguna pastelería. Caminando caminando seguro que llegarás a un antiguo arsenal de cañones con mosaicos en sus paredes y a la Maison Tavel.

La Maison Tavel, con su fachada negra (gris más bien) fue una casa que perteneció a la nobleza suiza. Un incendio la destruyó en el año 1 334 y fue reconstruida por la familia Tavel. Hoy en día es un museo (gratuito) en el que se exponen diferentes objetos antiguos, estancias y habitaciones de época, maquetas, etc. Recomiendo la visita, imaginarse la vida en otra época es posible en esta mansión y además tienen guía en español.

Para moverte dentro de Ginebra lo mejor es usar el tram (tranvía). El abono es caro pero en los hoteles te ofrecen una tarjeta gratuita que puedes usar durante tu estancia y no pagas nada, eso es un puntazo, aunque es una ciudad tan pequeña que se puede ir andando a todos lados como hacía yo.

Para ir de tiendas la calle más conocida es la Rue de la Croix-d'Or, donde también encontramos la tienda de navajas suizas Victorinox. Lo mejor de la tiendas es la exposición de navajas del piso -1, allí además se muestra como se fabrican y hay navajas con todo tipo de diseños y tamaños.

Junto a la Estación Cornavin, la estación de trenes de la ciudad, se encuentra el barrio de Les Grottes, un lugar totalmente distinto al resto de la ciudad. Allí se juntan los jóvenes, hay mucho ambiente tanto para salir a bailar como a cenar, es un barrio bohemio que desprende buen rollo y las fachadas de sus edificios son muy coloridas y tienen elementos que recuerdan a Gaudí. Ojalá tuviese mejores fotos para enseñar porque estas no le hacen justicia.

A continuación tenemos las banderas de la entrada del Palacio de las Naciones, un complejo de edificios que alberga, entre otros, las oficinas de diversos organismos de la ONU. Frente a esa entrada vemos la Silla Rota (Broken Chair), un monumento que simboliza el rechazo de las minas antipersonas y de las bombas de racimo. Está hecha de madera y tiene una altura de 12 metros, la verdad es que impresiona.

Y, para terminar, el Jet d'Eau, uno de los monumentos más conocidos de la ciudad. Este chorro de agua alcanza los 140 m de altura. Se me hace difícil imaginar Ginebra sin el Jet d'Eau, una de las cosas que más me gusta hacer cuando voy es caminar hasta ponerme debajo (y sí, empaparme (menos en invierno, que hace un frío que pela)).

¿Habéis estado en Ginebra? ¿Os gustaría ir?

¡Contadme en los comentarios!

Ginebra es preciosa pero muy cara. Para comprar comida te recomiendo la cadena de supermercados Migros, que es como un Mercadona. Para dormir busca alojamiento en barrios como Meyrin o Vernier, o en pueblos cercanos como Saint Genis Pouilly (mi ex-pueblo 🏡, que en realidad está en Francia junto a la frontera, pero los ginebreses lo consideran su "ciudad dormitorio").

Espero que el post os sirva de utilidad, ¡un abrazo!